Lo esencial es visible a los ojos

En este momento histórico de nuestra Patria esta afirmación es posible porque:

Muchísimos de nuestros jubilados no pueden comprar sus remedios

Hay más de 14 000 niños y niñas de la Ciudad de Buenos Aires no tienen vacantes en las escuelas públicas

El consumo de leche ha descendido a niveles ruines

Las fuerzas de “seguridad” se están convirtiendo en fuerzas de inseguridad

El desempleo crece y crece dolorosamente no sólo para aquellos que lo padecen sino también para quienes teniendo trabajo sentimos la indignidad y la bronca por esas familias destruidas por la indigencia

A los maestros se los trata y maltrata como si fuesen delincuentes

Se pretende negar los servicios de salud a nuestros hermanos latinoamericanos negando nuestra propia identidad mestiza

Se cierran y abren al antojo de las encuestas escuelas rurales, sometiendo a la incertidumbre a tantas familias, tratando de descartables a esos niños y niñas vedando un derecho impostergable

La libertad de expresión es burlada, sometida al poder hegemónico y encapsulada cerrando radios, programas, silenciando voces disidentes

Se colman los comedores populares a los cuales no sólo ingresan los más pobres sino también los que no pueden llegar a fin de mes a pesar de tener trabajo

Crece y se justifica la violencia doméstica hacia las mujeres y niños con argumentos falaces y engañosos, ocultando (o pretendiendo ocultar) estos crímenes

Hay compañeros presos con argumentos que no se sostienen inclusive para los legos y se otorgan prisiones domiciliarias a los genocidas condenados legalmente

La justicia en muchos casos (más cada día) tiene la venda caída y es mancillada en su “sonada” independencia, con carpetazos o alineaciones con los caprichos o necesidades de los más poderosos

Y por último estoy de acuerdo con el presidente que en su discurso de hoy en la apertura de sesiones aseveró que el crecimiento es invisible. Por cierto todo lo indicado anteriormente le dan razón a su afirmación…

 

Cristina Campagna